miércoles, 14 de agosto de 2013

La estupenda primera noche.

Mientras, fueron a ver qué tal era la casa y la encontraron fabulosa. Había hasta una piscina...en una casa en la playa.
-¡Mira esa piscina!-Exclamó Lucy acercándose con Pru.
-¡Mira eso!-Y apunto un punto cualquiera en la piscina.
-¿Qué cosa?-Preguntó Lucy extrañada acercando su cabeza a la piscina.
-¡Eso!-Pru empuja a Lucy, y esta tropieza y cae al agua.
Mientras Pru reía, Lucy salió del agua tosiendo un poco.
-Eres una Groupie.-Le toma el pie a Pru y lo jala, hasta que Pru cae también a la piscina.
-Prostituta.-Dijo Pru saliendo del agua-Oye...
-¿Qué?-Dijo Lucy tratando de flotar, lo cual no podía hacer por el peso de su ropa-Oye, aquí no se puede flotar.
-Es por el peso de tu ropa, tonta.-Luego de hacer una pausa habló-No deberíamos estar tratando de flotar.
-¿Por qué no?
-Porque debemos esperar a los chicos y de ahí ver que trajeron para comer y cocinar...-Lucy interrumpe.
-¿Tú crees que ellos traerán algo que se tiene que preparar?
-No.
-Entonces relájate.-Y Lucy comenzó a nadar, pero Pru no lo hizo, sino que salió de la piscina con los bolsillos de su pantalón llenos de agua-Ya sal de ahí.-Y entró a la casa sin importarle de que estuviera empapada hasta los huesos.
-Ya voy.-Nadó hasta el otro extremo de la piscina y salió.
Mientras se secaban y cambiaban de ropa, los chicos llegaron. Como no las encontraron por ninguna parte, las comenzaron a buscar. Las chicas estaban en una habitación del segundo piso.
-¡Chicas!-Gritó Jude.
-¡Pru!-Gritó Stu.
-¡Lucy!-Gritó Ross.
-Acá estamos, tarados.-Dijo Pru saliendo de la habitación junto con Lucy.
-Ya compramos las cosas.-Dijo Robert.
-¿Qué trajeron?-Preguntó Lucy bajando las escaleras con Pru.
-¿Qué creen? ¡Pizza!-Dijo Pete mostrando la pizza a Lucy y a Pru.
-Te lo dije.-Le dijo Lucy a Pru.
-Ya qué...Ya no quería cocinar.-Dijo Pru encogiéndose de hombros.
Entonces pusieron los cubiertos, los vasos, los platos y la pizza en la mesa. Se sentaron, y a los cinco minutos, ya no había rastro de pizza.
-Oye, ya estoy lleno.-Dijo Evan tirando su cuerpo hacia atrás, apoyando la espalda en la silla.
-Y yo.-Dijo Pete haciendo el mismo acto que Evan, pero tirando una servilleta hecha bola a su plato.
-¿Por qué no vamos a la playa?-Propuso Lucy.
-Nadie dijo que no.-Respondió Robert.
-Yo no te pregunté a ti.-Respondió Lucy.
-Claro que si. Dijiste: ¿Por qué no vamos a la playa? Les preguntaste a todos.-Dijo Robert cruzándose de brazos con una sonrisa burlona en los labios.
-Si, les pregunté a todos, menos a ti.
-Por algo respondí, Lucy.-Dijo Robert.
-Te voy a matar.-Dijo Lucy.
-Entonces, hazlo.-Dijo y abrió los brazos.
Lucy se puso de pie y corrió al lugar en donde estaba Robert, este se pone de pie y corrió al segundo piso. Lucy lo sigue. Robert, mientras ella lo seguía, se escondió detrás de una puerta. Cuando Lucy pasó por ahí, Robert la toma del brazo y la mete a la habitación cerrando la puerta y apoyándose en ella.
-¡Bu!-Dijo él.
-¿Qué quieres?
-Nada.-Le toma el otro brazo y la acerca a él.
-Ya deja eso, ¿Quieres?-Dijo ella tratando de zafarse de él.
-No, no quiero.-La acerca un poco más a ella y la abraza fuertemente.
-Ya, déjame.-Dijo ella empujándolo, pero sin tener éxito.
-¿No puedo abrazarte?
-No, no puedes.-Dijo tratando aún de zafarse.
Cuando hacía eso, Robert le tomó la cara a Lucy rápidamente y la besó en los labios. Entonces Lucy abrió los ojos como plato y se lo quitó de encima.
-Oye, ¡Estás con Cyn!
-¿Y eso qué? No nos hablamos desde hace mucho, y ya no creo que me guste.
-¿En serio?-Robert asiente.
-Oh...-Robert se acerca a ella, toma la cara de Lucy pero esta baja la cabeza, provocando que Robert no pudiera ver su cara-No se puede.
-Si se puede.-Dijo Robert tratando de encontrar los labios de Lucy.
-No se puede. ¡No, no!-Dijo ella quitando las manos de Robert de su cara.
-¡Dije que si!-Le toma la cara nuevamente y la besa nuevamente en los labios. Pero esta vez, Lucy torpemente se dejó llevar.
Mientras se besaban, alguien abre la puerta repentinamente. Era Ross.
-Lo siento.-Dijo él con la mirada algo triste. Lucy y Robert se separan al instante.
-No, no importa, viejo.-Dijo Robert.
-Lo siento, Ro...-Ross interrumpe a Lucy.
-No importa, Lucy.-Y luego Ross cierra la puerta.
-No puede ser.-Dijo Lucy agarrándose la cabeza.
-¿Qué cosa?-Preguntó Robert. Lucy lo mira fijamente y luego mueve la cabeza negativamente.
-Nada.-Dijo ella caminando hacia la puerta.
-Espera...-Dijo Robert agarrándole la mano a Lucy.
-¿Qué?-Dijo ella dirigiéndole la mirada a Robert y tratando de quitar su mano de la suya.
-¿Te gusta Ross?-Dijo tomando la mano de Lucy más fuerte.
-No te importa.
-Si me importa.
-¡Dije que no te importa!-Hace un movimiento brusco con su brazo provocando que Robert le soltara la mano. Lucy salió de esa habitación y fue a buscar a Ross.
Lo buscó por todas las habitaciones, les preguntó a todos si lo había visto. Pero nada. Salió al patio y vio en el patio de la casa de al lado una mujer ya mayor.
-Hola. ¿Ha visto a un chico alto, con pelo largo y oscuro?
-Ah, si. Se fue camino a la playa, creo. Porque iba en esa dirección.-Y levantó su brazo derecho y señaló un camino.
-Ok, gracias, señora.-Y comenzó a correr.
-¡Señorita!-Le gritó la mujer.
-¡Lo que sea!-Gritó Lucy desde lejos.
Corrió hasta la playa. Lo buscó y lo buscó, y ahí estaba, sentado en la arena, mirando el mar.
Lucy trató de no meter ruido. Caminaba rápidamente, pero de repente se le enredaron los pies estúpidamente y cae al suelo. Quedando llena de arena. Ross se volteó y la vio allí tirada en el suelo.
-Lucy...-Dijo él. Se levantó y la ayudó a ponerse de pie.
-La arena tiene sabor a vainilla.-Dijo ella pasándose la lengua por sus labios, los cuales estaban llenos de arena.
-No hagas eso.-Dijo Ross. Entonces Lucy lo queda mirando fijamente y luego bajó la mirada-¿Qué pasa?
-Lo siento.-Dijo Lucy después de un momento.
-¿Te gusta Robert?-Entonces Lucy vaciló un poco y al fin dijo algo.
-Supongo que...un poco.-Dijo algo insegura, aún con la mirada clavada en el piso.
-Esta bien. Son tus sentimientos, no los míos.-Dijo él con una leve sonrisa en los labios.
-Entonces...¿Amigos?-Dijo ella levantando la mirada al fin y sonriendo inmensamente. Ross asintió.
Ross se acercó a Lucy y la abrazó. Luego de unos segundos, Ross la suelta.
-Deberíamos irnos a casa.-Dijo él. Lucy coincidió y se fueron a casa.
Cuando llegaron a ella, todos estaban en un círculo en la sala de estar escuchando música.Todos se estaban mirando directo a los ojos, algunos con los ojos llorosos y otros llorando.
-¿Qué les pasó?-Preguntó Ross. En eso, Pete cerró los ojos fuertemente y se los fregó.
-¡Te dije que iba a ganar!-Le gritó Robert llorando.
-Estamos jugando a las "Quemadas de ojos" o algo así.-Dijo Stu.
-Ya veo.-Dijo Ross.
-Yo quiero jugar.-Dijo Lucy.
-Entonces, ven.-Dijo Robert corriéndose un poco hacia el lado derecho y dejando un espacio entre Pru y él para Lucy.
Lucy se sentó y Ross se sentó al lado de Evan y Jude.
-Bueno, Lucy. ¿A quién quieres desafiar?-Preguntó Pru.
-No lo sé.-Pensó un momento y luego siguió-A Jude.
-¡Oye!-Gritó Jude y luego siguió-Bueno, ya.-Dijo y miró fijamente a Lucy, al igual que ella a Jude.
-Yo elijo a Ross.-Dijo Robert con una mirada desafiante.
-Dale, hermano.-Dijo Ross, y miró fijamente a Robert.
Entonces quedaron: Lucy y Jude, Robert y Ross, Pru y Evan, Stu y Pete. El primero en perder fue Stu.
-Ay, no.-Dijo él.
-En tu cara.-Dijo Pete.
-Ja, ja.-"Rió" Stu.
-¡Me duele!-Gritó Lucy casi llorando.
-¡Si, voy a ganar!-Gritó Jude con una sonrisa y con los ojos llorosos.
-¡No! ¡No! ¡No! ¡No!-Gritó Lucy llorando. De repente ella cierra los ojos-¡Me duele!-Y los friega.
-¡Si!-Gritó Jude con los ojos fuertemente cerrados-Me debes una cerveza.
-¿Yo?-Dijo Lucy.
-Tu perdiste.-Dijo Jude.
-No te daré tu cerveza, idiota.-Dijo Lucy abriendo los ojos.
Entonces siguieron jugando. Hasta que dieron las cinco de la tarde. Fueron a desempacar y a hacer las camas y a sacar el polvo de las habitaciones. Pru y Lucy estarían en una habitación, Robert y Jude en otra, Stu y Pete en la penúltima, y Ross y Evan en la última. Terminaron de hacer todo en una hora. Luego de que terminaran Pru y Stu se fueron al patio a fumar cigarrillos.
-Ya, basta.-Dijo Pru, mientras estaba abrazada con Stu.
-¿Te digo algo?-Dijo él.
-¿Qué?
-Te amo.-Dijo él mirándola a los ojos.
Pru quedó paralizada. No supo que decir. Era como si hubiera quedado hipnotizada con los ojos de Stu. Se tardó como dos minutos en responder un "Yo también."
-¿Por qué tardaste tanto?-Preguntó él.
-No lo sé. Por alguna razón me puse nerviosa.-Dijo ella. Él se limitó a reír y luego a besarle dulcemente.
En eso, abren la puerta repentinamente. Era Lucy que escapaba de algo con una botella llena de agua en la mano.
-¡No!-Gritó Lucy mientras corría por todo el patio.
En eso sale de la casa Evan, también con una botella llena de agua en la mano. Él estaba empapado. Pru deja de besar a Stu al instante.
-¡Mira como me dejaste, Lucy!-Gritó Evan corriendo en dirección a ella.
-¡Ah!-Gritó Lucy-¡No! ¡No te salpico agua nunca más lo prometo! ¡Lo prome..!-Fue lo último que dijo cuando Evan le tiró un poco de agua encima-Bastardo.
-No quedaste más mojada que yo.-Dijo él. Luego le tomó el brazo-Quiero hablar contigo.
-Estamos a mano.-Dijo ella. Luego entraron a la casa, dejando a Pru y a Stu solos nuevamente.
-¿Por qué no entramos a la casa?-Dijo Pru-Ya me está dando un poco de frío.
Entonces Stu asintió y entraron a casa. Lo primero que se encontraron fue a Lucy y a Evan hablando en susurro.
-Que no le he dicho a na...-Dijo Lucy, luego volteó a ver a los chicos, junto con Evan-Hola.-Dijo ella con una sonrisa.
-Vamos a la habitación.-Dijo Evan.
-Si quieres.-Dijo Lucy.
-¿Estos tienen algo?-Preguntó Stu con una pícara sonrisa.
-Nada que ver.-Dijo Pru.
-Entonces, ¿Por qué Evan...?-Pru lo interrumpe.
-Estaban hablando de un asunto privado. Eso es todo.
Pru sabía de lo que estaban hablando. Recordó al instante, cuando Lucy le contó que Evan estaba enamorado de ella. De seguro que era eso. Pru se preocupó y ni si quiera escuchaba a Stu, que ya le estaba hablando de hace rato.
-¡Pru!-Gritó Stu.
-Ella reacciona-¿Qué?
-Estoy aburrido.
-¿Por qué no vamos a la playa en la noche?
-¡Sería fabuloso! ¿Con los chicos o sin?
-Con.
-¿Sin?
-Con.
-¿Sin?
-¿No quieres ir con ellos?
-Sí, pero quiero un momento a solas contigo.-Y movió sus cejas de arriba hacia abajo.
-Ay, Stu. No seas...tonto.
-No soy tonto. Sé que te gusta la idea.-He hizo el mismo movimiento anterior con sus cejas.
-Stu, ¡Basta!-Dijo ella con una risa nerviosa.
Siguieron así, hasta que se fueron a la sala de estar.
Dieron las ocho de la noche. Todos se arreglaron y Jude sacó su guitarra. En realidad no hacía frío, así que no fueron tan abrigados.
Cuando llegaron a la playa, sintieron un tremendo frío, así que fueron e hicieron una fogata. De ahí se les pasó. Les dieron hasta ganas de tirarse al mar, y así lo hicieron. Todos.
-¡Stu, ven conmigo!-Gritó Pru.
-¡Ya voy, linda!-Gritó él.
Corrió hasta Pru, la tomó en brazos y comenzó a correr nuevamente en dirección al mar. Luego de llegar a él y a los más profundo, Stu pegó un saltó y cayó al agua con Pru en brazos.
Luego de que Lucy se quitara la blusa que traía y la dejara cerca de la otra ropa, alguien la toma en brazos comienza a correr rápidamente. Ella trata de investigar de quien se trataba y era Robert, que luego de que él la mirara, le da un beso en la nariz y luego sonríe. Aún corriendo. Hicieron lo mismo que Pru y Stu.
De repente, Lucy siente que algo le roza la mano, como si estuviera buscando algo y que la mano de Lucy fuera eso lo que buscaba. La agarró fuertemente luego de rozarle como dos veces. Lucy salió de inmediato del agua y levanta su mano y ve otra encima de la suya. En eso sale Robert del agua y ella ve que se trataba de él.
Robert entrelazó su mano con la de Lucy, y luego de hacer eso, repentinamente él la abraza. Ella respondió al abrazo con el mismo gesto. Permanecieron así durante cinco minutos.
Robert le tomó la mano de nuevo a Lucy y se fueron a reunir con los demás, nuevamente en la fogata. Jude sacó su guitarra mientras que todos se sentaban al rededor de la fogata para entrar en calor. Jude comenzó a tocar una melodía. Igual que lo hacen los grupos de jóvenes que tienen plata cuando van a la playa en la noche y la pasan bien. Así mismo.
Después de tocar algunas canciones y cantar, dejaron la guitarra a un lado y comenzaron a dar vueltas al rededor de la fogata y a gritar. Era tanto el bullicio que llegó la policía. 
-¿Qué pasó acá?-Dijo uno de los oficiales.
De ahí pararon todos de danzar y todos pusieron fijamente la mirada en él.
-Ah...Nada, oficial.-Dijo Ross.
-¿En serio?-Dijo otro. Eran tres en total.
-De verdad.-Dijo Stu.
-Apaguen eso ahora. Nosotros los iremos a dejar a sus hogares.-Dijo el tercero.
-Mierda.-Dijo Lucy de pronto, y se agarró la cabeza y luego se cubrió la boca con ambas manos.
-¿Cómo dijo?-Preguntó el segundo oficial que había hablado.
-No, nada.-Dijo Lucy algo nerviosa.
-Dígame la verdad, señorita...-Robert interrumpe al mismo oficial.
-Dijo que nada, oficial.-Dijo Robert con firmeza. En eso el oficial queda mirando fijamente a Robert y pronunció unas palabras, que a Robert y a todos los pusieron muy nerviosos.
-¿Quién es usted para interrumpirme?-Dijo el oficial con más firmeza que Robert.
-Harold Starkey.-Mintió Robert que, con algo de nerviosismo tragó algo de saliva.
-¿Y tú crees que me vas a engañar con ese nombre tan usado?-Preguntó el oficial dándose cuenta del nerviosismo de Robert. Como no hubo respuesta, siguió-Te vas con nosotros.
-¡No!-Gritó Lucy.
-¿Te quieres ir con él?-Preguntó el mismo oficial.
-No se lo lleve.-Dijo sin responder a la pregunta del oficial, lo cual enojó muchísimo al mismo.
-¿Te quieres ir con él, si o no?-Preguntó nuevamente gritando y mirando fijamente a Lucy.
-No, señor.-Dijo ella con miedo.
-¡No le grite así a mi novia!-Gritó Robert con los ojos cerrados.
Entonces todos quedaron perplejos, hasta Lucy. El oficial se dirigió hasta Robert, lo miró fijamente, luego alzó su puño derecho y golpeó a Robert en la nariz. Éste cae al suelo y Lucy grita, al igual que Pru. Entonces todos quedaron aún más perplejos.
-¿Por qué lo golpeó?-Preguntó Lucy. Entonces el oficial la miró fijamente y caminó hasta encontrarse frente a frente con ella.

1 comentario:

  1. Y pensar que todo esto tiene que pasar el próximo año... ah.
    Qué difícil es la vida ;-;

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